domingo, 2 de junio de 2013

detalles

"Andando, paso tras paso, toda una vida andando. Un pie detrás de otro y el tiempo y los pensamientos fluyen con la naturalidad de un río. Una vida de vagar sin rumbo, solo entre la multitud, buscando rincones en los que cultivar el silencio, disfrutar de mi soledad.
Pero todo cambia.
 Un paso más y noto un cambio de presión en la mano... eres tú, y con solo ese apretón me lo has dicho todo. Me giro y veo como el viento te alborota el pelo y siento el impulso de besar tu mejilla, tu cuello, pero no, aún no, me gusta este silencio compartido, dejaré que dure un poco más. Y tras el beso una tímida sonrisa, mi corazón se derrite y no puedo evitar admitir que ya es tuyo por completo. No tengo miedo de decirlo, ni temo lo que puedas hacer con él... pues sé que hay mucho que ganar.
Y no puedo evitar divagar, pensar en estrellas de pálida piel o en mujeres mariposa y que tal vez, como pasa con las mariposas, seas fácil de asustar. Por eso me gusta verte en acción, me retiro a un segundo plano, y disfruto viendo cómo buscas un libro entre estanterías o decides cómo será la siguiente tarta. Y cuando menos me lo espero, te pones de puntillas y me das un beso en la mejilla. Y cada día me siento más recompensado, pues creo que sientes que puedes ser tú misma a mi lado ¡y me encanta!"